Recuerdo haber pensado o dicho alguna vez que a Austria le tengo un cariño y aprecio muy especial. Visualmente como sensorialmente es un país que cuenta con paisajes naturales demasiado sweetys-perfectos, su gente muy bonachona y cándida, además de buenos platillos gourmet.
Hoy precisamente me puse muy nostalgicóna porque recibí un correo con contenido de recomendación musical proveniente de estas tierras. Y como me lo describe Alexander en su correo, la rola Spiracle llega a emitir: tristeza y belleza al mismo tiempo- (pensé: uy qué darketón).
Aún así debo defender y aclarar que los austriacos, sobre todo los de la parte sur es gente demasiado sensible, emotiva. Por aquello de su contacto nato con la naturaleza que les rodea todo el tiempo.
expongo el email del Alexander Stock:
Hey, How are you?
I found some amazing music: myspace.com/soapandskin
listen to spiracle, isn't it so sad and beautiful a the same moment...
greets from my room in leoben
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